Como los alimentos influyen en la inteligencia de los niños

Conoce en Te ves Genial, como los alimentos influyen en la inteligencia de los niños.

A medida que crecen, el cerebro de los niños crece y cambia cada día. Una gran parte del desarrollo cerebral se produce durante la infancia, continúa hasta bien entrada la adolescencia y no se detiene hasta los 25 años. Y a medida que el cerebro evoluciona, también lo hace la inteligencia del niño.

El cerebro controla todo lo que hace el cuerpo: caminar, hablar, hacer la digestión, mantener los latidos del corazón y establecer los recuerdos que ayudan a aprender. Y el cerebro -como el resto del cuerpo- necesita una nutrición adecuada para alcanzar su máximo potencial

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¿Cómo afecta la alimentación a la capacidad de aprendizaje de un niño?

Los alimentos que los niños comen y disfrutan afectan a su salud mental y física, y repercuten en la capacidad del niño para aprender y prosperar en la escuela. Curiosamente, no es sólo lo que comemos lo que influye en el aprendizaje. Los estudios demuestran que la forma de comer es importante. Se ha demostrado que las comidas familiares regulares, en las que uno o más adultos comen con los niños, mejoran el rendimiento académico de los niños, así como su capacidad de recuperación, su conexión social, sus habilidades lingüísticas y su salud mental.

¿Hay algún alimento que deba evitarse?

En realidad, no. Ser demasiado restrictivo con los alimentos suele tener el efecto contrario. Los niños pueden obsesionarse con estos alimentos, comiendo más de ellos cuando tienen la oportunidad. Es un error común pensar que los alimentos con alto contenido de azúcar afectan negativamente al comportamiento del niño. Todos los alimentos nos dan energía para alimentar nuestro cerebro. La variedad es la clave.

¿Hay algún consejo para conseguir que los niños coman ciertos alimentos que podrían ayudar a su salud?

La presión bienintencionada es contraproducente para la alimentación a largo plazo, ya que los padres preocupados utilizan técnicas de presión para "conseguir" que los niños coman. Los sobornos y las súplicas pueden funcionar a corto plazo, pero lo que queremos es que nuestros hijos aprendan a gustar de una variedad de alimentos cerebrales, no sólo ahora sino para siempre. Lo mejor que pueden hacer los padres es comer con sus hijos, ser modelos de cómo comer y disfrutar de una variedad de alimentos. Tengan paciencia, traten de mantener la calma, ofrezcan los alimentos y dejen que los niños los prueben a su debido tiempo. Las exposiciones agradables y repetidas a una variedad de alimentos en un entorno tranquilo son las más eficaces.

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Alimentos para la inteligencia de los niños

Céntrate en los siguientes grupos de alimentos a la hora de nutrir las mentes y los cuerpos en crecimiento.

1 Frutas y verduras de color

Los diferentes colores de la fruta y la verdura demuestran que son ricas en antioxidantes, que ayudan a proteger las células del cerebro contra el daño de los "radicales libres". Comer una variedad de colores garantiza que tus hijos reciban una buena gama de nutrientes y antioxidantes para ayudar a que su cerebro prospere.

¿Qué alimentos?

Para el desayuno, unta una tostada con aguacate, o prepara una tortilla llena de verduras, un burrito de desayuno o judías al horno. O añade zanahoria o calabacín rallados a las gachas de avena o a los cereales. Mete palitos de verdura en la fiambrera y mete verduras en los sándwiches. Para la cena, haz que las verduras sean las protagonistas, y la carne la guarnición.

La zanahoria rallada, el calabacín y las lentejas (si son de lata, sólo tienes que escurrir el líquido) se adaptan a cualquier cosa. Ayuda a tus hijos a merendar con verduras y salsas. Muchas salsas, como el hoummos y el tzatziki, contienen verduras, por lo que recibirán una dosis doble. Prueba con bolas de bizcocho de zanahoria, garbanzos asados o galletas de garbanzos como tentempié. Puedes utilizar verduras frescas, congeladas o enlatadas.

2 Panes y cereales de algodón

Los panes y cereales menos refinados y con más fibra tienen un índice glucémico (IG) más bajo, lo que significa una energía más duradera, una mayor concentración, un estado de ánimo estable y la ausencia de la depresión de las tres de la tarde.

¿Qué alimentos?

Pan y galletas multicereales, avena tradicional, pasta y arroz basmati integral.

3 Alimentos ricos en proteínas

Los alimentos ricos en proteínas ayudan a aumentar las sustancias químicas "felices" del cerebro, como el triptófano y la serotonina, que ayudan a regular el estado de ánimo, el apetito y los patrones de sueño. Además, proporcionan un aporte adecuado de hierro. El hierro es necesario para transportar el oxígeno por el cuerpo. Si el cerebro y los músculos carecen de oxígeno, tu hijo se sentirá muy cansado, lo que dificultará que se sienta entusiasmado por cualquier cosa.

¿Qué alimentos?

Incluye carne magra, pescado, marisco, aves, frutos secos y/o legumbres, que son buenas fuentes de proteínas y hierro. Los huevos y los productos lácteos -leche, queso y yogur- también son ricos en proteínas.