En qué consiste la meditación

Muchas veces escuchamos o leemos sobre la importancia de la meditación, por ello, en las siguientes líneas, comenzaremos a averiguar realmente en qué consiste la meditación y como ella nos puede ayudar en nuestra vida.

De acuerdo con Shunryu Suzuki, maestro Zen y autor de Zen Mind, Beginner’s Mind, “la meditación no es una actividad emocionante sino la concentración en nuestra rutina diaria; cuando se practica con calma y de modo regular la vida diaria se ilumina”.

Como surgió la meditación

Las personas han buscado durante siglos ese examen interno en un afán por encontrar la paz y la armonía interiores. Muchos han alcanzado ese estado de “iluminación”: la presencia de la alegría y la creatividad en la vida diaria; la capacidad de “ver” dentro de la realidad de las cosas y de saber con plenitud de conciencia lo que realmente son.

¿Cómo lo lograron?

Descubrieron un método que les daba resultado y lo practicaron de forma continua hasta que los llevó a donde querían llegar. Por ejemplo, Jabbar, un místico Sufi, creó la técnica gibberish (emisión de sonidos ininteligibles) y muchos de sus discípulos alcanzaron el estado de iluminación recitando esos sonidos. Hotei, el místico japonés conocido también como “el Buda que ríe”, eligió la risa y enseñó a sus discípulos a reír hasta alcanzar el estado de iluminación. Buda creó el vipassana, una técnica que consiste en presenciar y observar la respiración.

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Que puedes lograr con la meditación

La meditación nos libera de la mente. Nos libera del yugo de nuestro condicionamiento, de lo tradicional, de las formas inflexibles de pensar. Estar cada vez más alerta nos da la capacidad de “vigilar” la mente y darnos cuenta de que hay nuevas posibilidades de encontrar nuestras preferencias, nuestra forma exclusiva de hacer las cosas.

Centrar la atención en nuestro interior nos abre las puertas del subconsciente y permite que surja la creatividad que reside dentro de nosotros.

Casi todo lo que hacemos en la vida lo hacemos a través de la mente. Por lo tanto, cuando nos centramos en nuestro interior, pensamos que tenemos que usar la mente, pero la meditación nos ofrece la excepcional posibilidad de desidentificamos de nuestra mente. Nos ayuda a reclamar nuestra sabiduría interior.

Cómo funciona la meditación

La meditación se basa en una relajación: una sensación de tranquilidad física, mental y emocional, de descanso interior que comienza con todo nuestro cuerpo.

Es imposible lograrlo si el cuerpo está lleno de las tensiones y del estrés del día. La relajación, no se puede forzar, “es más bien no ’'hacer nada, es permitir, simplemente ser. Es un estado de dejarse ir. Para ilustrar lo que quiero decir, imagina que sostienes en la mano una pelota de tenis, Ahora, intenta dejarla caer. Es evidente que no puedes, porque todo lo que hay que hacer es abrir la mano y soltarla.

Lo mismo sucede cuando uno se relaja para entrar en meditación. Basta con abrirse, dejarse ir y mirar hacia dentro de uno mismo.

Para qué sirve la meditación

Nos ayuda a relajar más plenamente el cuerpo para poder estar conscientes de lo que hacemos y de cómo nos sentimos al hacerlo. Es un paso radical que debemos dar para hacernos responsables de nuestra propia felicidad. La necesitamos más que nunca. La meditación nos puede dar la seguridad de contar con un ancla interior; una piedra angular de cordura en un mundo cada vez más demencial.

Puede limar las asperezas de nuestra vida diaria, enseñarnos a tener más amor propio y más amor por los demás y ayudarnos a lograr la serenidad y la felicidad que buscamos.

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